La transformación de los ríos y las cuencas hidrográficas de nuestro territorio provocó un cambio sustancial en el transporte de la madera, que dejó de bajarse río abajo. Este hecho comportó a la vez la desaparición del oficio de raier hacia los años 30 del siglo pasado. Al cabo de los años, la Associació Cultural de los Raiers de la Ribera del Segre(Coll de Nargó) y la Associació Cultural de los Raiers de la Noguera Pallaresa (La Pobla de Segur y el Pont de Claverol) han hecho posible volver a revivir este oficio como una expresión cultural y tradicional.